Quiero uno.
En los años 30, algunas personas se paseaban en pequeños autos de 1 caballo de potencia. Los que aquí vemos eran vehículos a motor, pero gozaron de una enorme popularidad los cyclecars y velocars, autos a pedales de reducidas dimensiones, algunos propulsados sólo por pedales y otros equipados con lo que podríamos llamar una tecnología híbrida (pedal y motor). Algunos demostraron una impresionante potencia, como el Whitwood —de dos ruedas—, esta especie de auto-motocicleta fue capaz de alcanzar una velocidad de 150 kilómetros por hora, durante las pruebas del fabricante en Inglaterra, en 1934, toda una proeza, sin duda.