¡Asombrosas!
Hay muchos adjetivos para calificar los trabajos digitales y las ilustraciones de Paul Henderson: sublimes, espectaculares, impresionantes, sobérbias, magníficas y, desde luego, ¡asombrosas! Muchas de ellas están claramente impregnadas por el jugo sacro de corrientes filosóficas y religiosas de carácter oriental —funtamentalmente de la India—, marcado componente antropológico y étnico que dan a sus trabajos un toque distintivo y un aire ciertamente encantador, sin dejar de lado el erotismo acentuado de las miradas femeninas más embriagantes. En resumen, mezcla explosiva la de el amigo Paul, irresistible, capaz de no dejar indiferente a nadie y de seducir hasta a las rocas más sólidas.