Hasta 30 personas pueden sentarse cómodamente, incluso tiene una mesa en el centro.
AirLounge es de aire, como una de esas lanchas para navegar o castillos que se inflan para pegar brincos y volteretas, pero con este curioso invento lo que se forma es un amplio y confortable salón para tomar una copas y charlar con los amigos. Eso sí, es necesario un enchufe al que conectarlo para que se ponga en marcha el motor eléctrico que lo infla. Y lo mejor de todo, no es un concepto, ¡se vende!