La lluvia cae a tu alrededor, pero las gotas de agua esquivan tu cuerpo y no te mojas a pesar del aguacero ¿Misterio de la naturaleza? No, es la asombrosa instalación de rAndom.
Se trata de una gran sala (100 m2 ) en cuyo interior diluvia, a priori podría parecer una estupenda ocasión para darse una buena ducha, pero no es posible, ya que unas cámaras detectan las posiciones de los visitantes y apagan «el grifo» justamente sobre sus cabezas.