Un dispositivo mide la atención de los alumnos, captando sus ondas cerebrales, y pasa un informe —en tiempo real— al profesor. Éste comprueba en su monitor si su clase interesa o no, quiénes prestan más atención, quienes andan distraídos… quién se ha dormido.
Este método —aseguran— ayudará a mejorar el aprendizaje y a desarrollar nuevos métodos de enseñanza más eficaces. Se sabrá con certeza muchas cosas que ahora no son fáciles de medir, por ejemplo en que momento de la mañana el alumno está más receptivo para asimilar determinadas materias o en que temporadas la atención es mayor. El proyecto se llama Focus EDU y es de BrainCo, una startup surgida del Laboratorio de Innovación de Harvard.