Google apuesta ya hasta por el protocolo RCS en un acto desesperado por contrarrestar la hegemonía de Whatsapp.
Con la irrupción y el éxito de las aplicaciones de mensajería como Whatsapp, el SMS ha quedado casi olvidado y, salvo alguno que otro publicitario (y no siempre deseado), es muy raro recibir estos mensajes de texto. Google no ha olvidado esta tecnología, cree en su versión más avanzada o RCS —hasta ahora algo denostada por las operadoras— y va a apostar por su uso masivo.
Un mensaje RCS es —para entendernos— un SMS al que se le puede añadir imágenes, audios y hasta vídeos.
¿Por qué es novedoso o, como dicen algunos, es mejor que Whatsapp? No necesita un conexión a Internet y no será una aplicación en sí, sino un sistema o protocolo compatible con todos los terminales y operadoras, como los conocidos SMS. ¿Por qué puede ser un fracaso? Podría ser un canal para la propagación directa y sin control de publicidad rich media no deseada.