La Wikipedia dice: «Se llama prodigio a todo suceso extraño que excede los límites regulares de la naturaleza».
Famosos durante la década de los 80 y 90, en sus diferentes versiones, el CASIO F91 y sus predecesores F82 o F84 han marcado toda una época. Probablemente es el mejor reloj de pulsera de todos los tiempos si tenemos en cuenta la relación calidad-precio.
En los 80 y principio de los noventa, en España, se le llegó a llamar «el reloj de las comuniones». Ello era debido a que casi todos los niños recibían uno como regalo en tan señalada fecha.
Infalible marcando la hora, el «prodigio» japonés ha ofrecido también a lo largo de todo este tiempo alarma, señal horaria, calendario, cronómetro, luz y resistencia al agua. Con un diseño moderno y atractivo enfocado a la usabilidad, el reloj ha demostrado siempre una dureza espectacular a la hora de recibir golpes, caídas o arañazos. Otro aspecto a resaltar del «prodigIo» japonés es precisamente su precio, éste que llevo —el que se ve en la foto que ilustra el artículo— me costó 12 euros y hace ya más de 7 años que lo tengo y lo uso todos los días y para todo.
Mucha gente ahora dice que el reloj está moda de nuevo, pero la verdad es que para los que siempre lo hemos usado nunca ha dejado de estarlo.
