Pequeños robots se mueven de forma autónoma pero coordinados entre sí según las instrucciones de un programa. Reaccionan al tacto y son capaces de colaborar y acudir a la ayuda de los otros para mover objetos o realizar algunas operaciones complejas, como formar una figura determinada.
Investigadores franceses (INRIA) y estadounidenses de la universidad de Stanford ha creado estos diminutos robots cilíndricos llamados Zooids, tienen sólo 2,6 cm. de diámetro y 2,1 cm. de altura y apuntan a una nueva generación de interfaces para las relaciones entre el hombre y las máquinas. Pueden cumplir órdenes (agruparse en una determinada figura), actuar como pantalla (tienen un led) y ejecutar acciones (empujar un objetos).
Por ahora las interfaces de enjambre basadas en nanorobots es una tecnología incipiente, pero parece prometedora ya que el hardware y el software están disponibles para todos en ACM Digital Library