Neurocientíficos ya han dado los primeros pasos para que el aprendizaje instantáneo —al estilo Matrix— sea una realidad muy pronto.
En la película, el protagonista Neo aprende kung fu en unos minutos tras la «carga» directa de la compleja técnica de lucha en su cerebro. Se ahorra así años de entrenamiento duro y sacrificio. Sí, es ciencia ficción, pero podría dejar de serlo antes de lo crees.
Se obtiene información del cerebro de una persona entrenada y se traslada al cerebro de otra persona no entrenada, mediante la estimulación electromagnética de determinadas áreas. Gracias a este estímulo el aprendizaje se acelera hasta en un 33 %.
Un equipo de científicos de los Laboratorios HRL diseñaron el sistema y lograron que pilotos novatos aprendiesen a volar con mayor facilidad de lo habitual a partir de la experiencia de pilotos expertos. En el experimento, todos los alumnos fueron sometidos a la prueba pero solo algunos recibieron las ondas cerebrales «mágicas», este grupo de pilotos superó mejor el examen que los que no las recibieron.
